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El periodista argentino Andrés Oppenheimer y la periodista y escritora María Jimena Duzán conversaron sobre un eje central para el bienestar de cualquier país en el mundo: la felicidad. ¿Por qué esa palabra va mucho más allá del espíritu de la autoayuda y reside en el orden económico, político y social de las naciones?

Los dos periodistas, quienes aseguraron ser amigos desde muchos años atrás, conversaron sobre la obra ‘Cómo salir del pozo‘, en la cual Oppenheimer brinda una perspectiva particular respecto a la felicidad y los elementos que la componen. Su visión, indicó, va mucho más allá de la autoayuda: quería desentrañar ese sentimiento y convertirlo en un estado de bienestar social que impulse procesos colectivos y, por ende, sostenga una estabilidad en las naciones. 

 

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Oppenheimer usó varios ejemplos para traducir ese concepto de felicidad que abordó en el libro. Uno de ellos estuvo relacionado con Lionel Messi y la selección Argentina de fútbol. El equipo llegó al Mundial de Catar 2022 como uno de los favoritos, pero perdió el primer partido contra Arabia Saudita (equipo ‘tronco’ según se familiarizó el periodista con este término colombiano). Luego de ello se recuperaron y ganaron hasta coronarse como campeones de la cita mundialista. 

Esta historia la contaba una profesora de India en el salón de clase con un propósito particular: preguntarles a sus alumnas y a sus alumnos cuáles eran sus fracasos recientes y cómo el análisis de estos hechos podrían ayudarles a seguir adelante y, como la Selección Argentina, resurgir de las cenizas. 

 

 

A la Feria del Libro de Bogotá (FILBo 2024) llega el argentino Andrés Oppenheimer, reconocido autor y conductor del programa «Oppenheimer Presenta» en CNN en Español y una figura emblemática del periodismo latinoamericano. Ganador del Premio Pulitzer y del Ortega y Gasset de Periodismo.

En una conversación con la periodista María Jimena Duzán, Oppenheimer aborda los temas tratados en su último libro, ‘¡Cómo salir del pozo!’, explorando los desafíos actuales y las posibles soluciones que enfrentan los países latinoamericanos en el contexto global. Esta vez, también conversa sobre su trayectoria como uno de los periodistas más influyentes de Estados Unidos. 

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La Alcaldía de Bogotá anunció el cierre de la estación de TransMilenio Calle 26 para el próximo 4 de mayo debido a las obras del metro de la ciudad. La intervención tendrá una duración de 10 meses y estará dividida en tres fases.

Según la empresa Metro de Bogotá, la intervención en el lugar consistirá en la construcción del viaducto, la cual se iniciará con el desmonte, la demolición de estaciones, el acondicionamiento de la vía y la cimentación de esta importante parte de la megaobra de movilidad.

 

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En la primera fase, que consiste en la demolición de la estación y que durará 25 días, la movilidad se verá afectada únicamente para los usuarios de Transmilenio, no así para los particulares. Durante este período, los buses circularán por ambos sentidos, pero en hora valle lo harán por un carril, mientras que en hora pico se habilitarán los dos carriles.

En la segunda fase, que implica un cambio en el uso de carriles, los particulares deberán usar las vías alternativas designadas por el Distrito, ya que los buses articulados ocuparán los carriles de los particulares.
Finalmente, en la tercera fase se podrá ver el avance del viaducto, con la ubicación de las columnas y capiteles por donde circulará la Línea 1 del metro.

“Este es un hito muy importante que generará molestias, lo sabemos, lo entendemos y por esa razón hemos trabajado entre todos los actores del Distrito responsables de este proyecto en un plan que permita mitigar al máximo el impacto que tendrá esta obra en el desarrollo de las actividades que tienen los ciudadanos”, expresó el alcalde Carlos Fernando Galán.

 

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Además, el mandatario detalló que en el corredor vial transitan más de 3.100 vehículos y 500 articulados en hora pico, y que se implementará señalización e iluminación en la zona de influencia para informar a la ciudadanía sobre las alternativas disponibles, donde se priorizarán 39 servicios para satisfacer la demanda del sector.

A medida que avanzan las obras del metro de Bogotá, se vislumbra un futuro de transformación en la movilidad de la ciudad. El reajuste de la Avenida Caracas, marcado por la demolición y reconstrucción de las estaciones de Transmilenio en Calle 26 y Marly, promete ser otro paso significativo en esta evolución. Si bien los cambios y las interrupciones pueden generar molestias temporales, estas obras son parte de un proyecto más grande que busca mejorar la calidad de vida de las y los bogotanos.

Otras estaciones de TransMilenio que cerrarán por obras del Metro:

Calle 72 (Troncal Caracas)
Calle 57 (Troncal Caracas)
Marly (Troncal Caracas)
Calle 63 (Troncal Caracas)

El alcalde Carlos Fernando Galán alertó frente al sobreconsumo de agua en Bogotá y anunció medidas para evitar el sobreabastecimiento durante los turnos de racionamiento.

El ahorro de agua en Bogotá es de gran importancia debido a los desafíos de gestión hídrica que enfrenta la ciudad. Con una población en constante crecimiento y un cambio climático que afecta la disponibilidad de recursos naturales, es fundamental adoptar prácticas de uso racional y consciente del agua. Esto implica hacer uso adecuado para las necesidades domésticas, industriales y agrícolas, además de proteger los ecosistemas locales.

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Según el marco regulatorio colombiano, el consumo básico de subsistencia en Bogotá es de 11 metros cúbicos de agua al mes. Para desincentivar el sobreconsumo de este líquido, la Administración Distrital definió un límite de consumo, que, de superarse, traerá sanciones económicas.

“A partir de ahora, quienes consuman más de 22 metros cúbicos de agua al mes van a tener un cobro adicional en la tarifa. El Acueducto lo anunciará cuando tenga las cifras exactas. Vamos a aprovechar esa herramienta para incentivar el ahorro de agua”, sostuvo el alcalde Carlos Fernando Galán.

Esta medida no incluye a algunos usuarios como inquilinatos, hogares comunitarios de bienestar o geriátricos, entre otros.

También se decidió reducir el consumo de agua empleada para la limpieza y mantenimiento de zonas públicas de la ciudad.  

“Hemos trabajado con la UAESP para suspender el lavado de áreas públicas, excepto en las zonas donde se requiera para evitar problemas de salud pública (…) Vamos a reducir en un 50 % esa intervención en zonas públicas de Bogotá”, sostuvo el alcalde Carlos Fernando Galán.

En el caso de TransMilenio, se reducirá el agua que se emplea para la limpieza de los articulados por dentro y por fuera, que es una actividad que se realiza diariamente.

“Vamos a lavar todos los días solo por dentro lo necesario por razones sanitarias. El interior se lavará una vez a la semana”, agregó el alcalde.

La meta de la Administración Distrital es reducir el consumo de agua en Bogotá y aumentar el nivel de los embalses; para ello, es clave la colaboración de la ciudadanía y de los operadores de limpieza de la capital.

“Necesitamos el concurso de la ciudadanía: lo que estamos haciendo en espacios públicos de lavado de áreas es estrictamente lo necesario por ser puntos sanitarios (…)  Hacemos un llamado a nuestros operadores para que cumplan con el compromiso de utilizar, en su mayoría, agua lluvias y agua reciclada de sus plantas de tratamiento”, dijo la directora de la UAESP, Consuelo Ordóñez.

¿Cuáles son las consecuencias del sobreconsumo de agua?

El llamado es a consumir la menor cantidad de agua posible y aprovisionarse solo de lo necesario durante los turnos de racionamiento. Fomentar una cultura de ahorro de agua en Bogotá es esencial para asegurar un futuro sostenible.

Consumo innecesario: 

Escasez de agua:

Contaminación de agua:

Proliferación de bacterias:

Afectación de las redes de Acueducto:

La Universidad del Rosario es uno de los claustros de enseñanza más antiguos de Bogotá y del país. Su sede icónica en el centro de la ciudad ha hecho que la denominada Plazoleta del Rosario se convierta en un punto de ubicación importante para la ciudadanía.

Las actividades académicas en las últimas semanas se han modificado por cacerolazos, protestas y otras acciones llevadas a cabo por estudiantes y miembros de la planta docente que no están de acuerdo con la permanencia de Alejandro Cheyne como rector de la universidad. Esto se suma, según indican los líderes y las lideresas de las manifestaciones, a manejos financieros irregulares y conflictos de intereses para decanaturas y altos cargos dentro de la institución.

 

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Los seis años de Cheyne: controversias, despidos y una carta abierta

 

Alejandro Cheyne tiene una trayectoria considerable en el panorama de la enseñanza, pues se ha destacado como docente y administrativo en diversos entornos pedagógicos. En 2018, cuando José Manuel Restrepo renunció a la rectoría de la Universidad del Rosario para convertirse en Ministro de Economía de Iván Duque, Cheyne se convirtió en la cabeza visible de los rosaristas. Fue reelegido en 2022.

Hace unos días, sin embargo, el clima universitario sufrió un remezón por cuenta de una carta anónima difundida en redes sociales. Según indica el documento, consolidado al parecer por estudiantes y docentes e incluso egresadas y egresados, en los últimos meses se han presentado diversas acciones administrativas que causaron incertidumbre.

“Hemos conocido de múltiples despidos en los últimos meses, tanto de personal indispensable para actividades académicas y de investigación, como de profesoras y profesores de todas las facultades o escuelas cuya trayectoria y dedicación han sido relevantes para lograr, en su momento, ubicar a la universidad entre las mejores del país”, dice el documento.

A ello se le suma la compra de diversos terrenos o espacios que, señalan, no tienen un propósito académico claro y, por el contrario, golpean las finanzas de la universidad. La solicitud del documento es, en esencia, conocer los estados financieros del Rosario y las razones por las cuales se despidieron profesores o se crearon nuevas facultades o carreras.

“Consideramos que esta información debe ser el primer paso para comprender la situación real de la Universidad, permitiendo a sus integrantes gestar espacios de discusión y evaluación sobre los cambios y mejoras necesarias para que una institución como la Universidad del Rosario pueda, con el apoyo sostenido de todas y todos, tomar decisiones informadas sobre su futuro”, cierra la carta.

 

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En consonancia con las solicitudes de la carta, y ante plantones y cacerolazos e inconformismo institucional general, el Ministerio de Educación le hizo una visita de control y vigilancia a la Universidad del Rosario.

Entretanto, siguen las exigencias de lideresas y líderes estudiantiles.

“El Ministerio vino a hablar con nosotros sobre las peticiones que tenemos para que se haga una intervención y se analice en qué se están gastando los recursos y por qué están sucediendo todo lo que nos convoca”, indicó Nicolás Alfonso, vocero del Movimiento Estudiantil Rosarista.

El sistema informativo AHORA estuvo frente a la Sede Mutis, ubicada en la carrera 24 con calle 63C, donde al mediodía se llevaba a cabo un cacerolazo. Una de las pancartas exhibidas era contundente: “¿Dónde está el material del laboratorio?”.

“Algunas de las razones por las que estamos acá y vinimos a hablar con el Ministerio es el recorte presupuestal: nos quitaron la póliza de salud mental, no hay citas de psicología dentro de la universidad. Además, la infraestructura está sin terminar, hay edificios que compraron pero no pueden terminar de pagar. No hay presupuesto para las becas de la población indígena o Rrom y tampoco hay presupuesto para la investigación”, explicó la vocera Salomé Mesa.

‘Las decisiones tomadas han sido respetuosas con las constituciones’: Cheyne

 

Tras el revuelo, el rector Alejandro Cheyne apareció en un video rechazando cualquier acto que atente contra la integridad institucional de la Universidad del Rosario y, sin referirse explícitamente a alguno de los problemas mencionados por los voceros o enumerados en la carta anónima, aseguró que todas las decisiones tienen una cimentación legal y jurídica.

“Las decisiones tomadas hasta hoy han sido respetuosas con nuestras constituciones y cumplen las instancias de control institucional (…) Las acciones de los últimos meses se hicieron con el objetivo de continuar nuestra apuesta institucional y optimizar nuestra gestión. Sí, se realizaron ajustes difíciles y muy dolorosos, lo cual representó un 2.4 % de nuestra población total en los últimos siete meses”, dijo Cheyne.

 

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Respecto a los ‘ajustes difíciles y dolorosos’, un alumno, quien mantuvo su anonimato, indicó que en días recientes los decanos de las facultades, de cierta manera, respondieron a la carta abierta con un comunicado en apoyo y solidaridad al rector.

Excepto una persona: Adriana Alzate, quien en 2022 fue nombrada como decana en Ciencias Humanas. Ella no firmó el documento y este lunes en la mañana, indica el alumno, presentó su renuncia voluntaria.

Queda esperar las conclusiones de la visita por parte del Ministerio de Educación y los nuevos acontecimientos en el entorno estudiantil rosarista.

Tablas mal puestas o inexistentes, huecos que dan al vacío, riesgo de que se atoren los pies de transeúntes o que se presenten accidentes de bicicletas, coches, sillas de ruedas y carritos de mercado: este es el panorama del puente Getsemaní, que comunica el barrio homónimo con el sector de San Bernardino en la localidad de Bosa, pues preocupa a las ciudadanas y los ciudadanos dado que se trata de una zona concurrida tanto en los días como en las noches.

Este paso peatonal, además de comunicar dos barrios, está por encima del río Tunjuelo, uno de los más importantes del sur de Bogotá. Como registraron las cámaras de AHORA, hay una distancia considerable entre la estructura y el agua, de manera que una caída puede poner en riesgo la vida de una persona.

 

 

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‘Por uno de esos huecos podría caer un niño’

Las y los habitantes de Bosa pisan con cautela cuando atraviesan el puente. Hay espacios del tablado del piso, sobre todo encima del agua del río Tunjuelo, sin una cubierta total. Si alguien pasara por allí sin percatarse podría sufrir un accidente.

La ciudadanía denuncia que las entidades encargadas de la infraestructura en Bogotá no les prestan atención a los problemas de la zona. Una de las residentes indicó que el deterioro del puente Getsemaní es apenas reflejo del descuido urbano, pues donde vive no hay un buen servicio de luz, agua o gas.

“La preocupación más grande que tenemos es hacia nuestros niños: el riesgo de caída porque pueden bajar y caer al río o, de todas maneras, caer desde una altura bastante elevada de los huecos”, indicó la ciudadana María Eulalia Ávila.

Se evidenció que, en un día común y corriente, sobre el puente también pasan motos. Si bien es una estructura destinada al paso peatonal, ya se volvió costumbre que estos vehículos se sumen al trajín cotidiano de las bicicletas, los peatones y las personas en condición de discapacidad quienes, sea en silla de ruedas o con cualquier otro apoyo, se ven obligados a eludir el laberinto de huecos del piso.

“Ellos (los motociclistas) hacen el desvío por acá, no es adecuado, pero lo hacen porque no hay un puente vehicular en San José dado que allá la vía está en mal estado también y por tema de inseguridad entonces vienen acá”, señaló Giovanni García, líder comunal de Bosa.

Recordemos que el pasado 12 de abril la Veeduría Distrital hizo acompañamiento ciudadano para identificar los principales problemas del puente. Según indicó la entidad, tras la recopilación de testimonios de la comunidad, el puente Getsemaní llevaría casi dos años en mal estado.

 

 

 

 

 

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“Uno no puede movilizarse seguro. Acá se movilizan muchos niños, muchas señoras con sus bebés. En todas las partes del puente hay huecos (…) Estamos muy susceptibles a un accidente muy grave. Está en riesgo nuestra vida”, indicó Andrea Pérez, residente del sector.

 

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La Alcaldía de Bosa, ante la multiplicidad de denuncias difundidas incluso en redes sociales, se pronunció para señalar que el puente Getsemaní, al tratarse de una estructura arterial, tiene prioridad y se espera su reparación total para finales de este año.

 

¿Cómo denunciar el mal estado de la infraestructura en mi barrio?

 

Todo tipo de afectación del espacio público, independientemente de su origen (invasión, por ejemplo, o irregularidad en la malla vial o en el estado de los puentes y las vías), puede reportarse en la página principal de la Alcaldía de Bogotá con el sistema ‘Bogotá te escucha’. Existe un formulario con nombres, datos y especificaciones del lugar de la denuncia.

También se puede remitir a la página principal del Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) o a sus canales digitales y telefónicos.

 

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Como ocurrió en el caso de Getsemaní, hubo un acompañamiento de la Veeduría Distrital que se convirtió en la respuesta de la Alcaldía local de Bosa, encargada principal del bienestar de quienes habitan la localidad.

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Desde la historia del rock en la capital hasta crónicas rojas, pasando por thrillers y poesía, son las historias que se pueden encontrar en la colección Leer para la Vida, que se centra en obras y libros que hablan de Bogotá.

La Red Distrital de Bibliotecas Públicas de Bogotá (BibloRed) cuenta con múltiples recursos para llevar la literatura a los bogotanos y las bogotanas. Uno de ellos son las “Colecciones digitales”, un repositorio donde se compilan, administran, preservan y difunden contenidos digitales en formatos como texto, audio, video, imagen y proyectos web.

Aquí encontramos la colección “Bogotá: Leer para la vida”, un proyecto editorial de la Dirección de Lectura y Bibliotecas de la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte que rescata y reivindica contenidos de diversos géneros y temas relacionados con la cultura y el patrimonio bibliográfico de la ciudad.

“Una de nuestras apuestas es poner a disposición de todos los y las usuarias libros que tengan que ver con la literatura, con autores bogotanos o que hagan reflexiones sobre estos paisajes y las temáticas que hablan sobre la ciudad”, sostuvo Andrea Victorino, directora de BibloRed.

Además de literatura, esta colección incluye diferentes áreas temáticas desde las que se ha abordado o comprendido Bogotá a lo largo de los años: historia, periodismo, música, arquitectura, urbanismo, narrativa gráfica y humor, entre otras. Lo que pretende es ofrecer a las y los lectores múltiples perspectivas de la ciudad, como si se tratara de recorrerla a través del tiempo y el espacio.

“A través de 15 títulos hemos recuperado autores o títulos que salieron del mercado editorial y tuvimos la oportunidad de re-editarlos y revisarlos, para tener una nueva edición que tenemos disponible tanto en libros físicos como digital en BibloRed”, agregó Victorino.

¿Qué libros que hablan de Bogotá encontramos en Leer para la vida?

En esta colección encontramos reediciones invaluables, como los tomos de ‘Chapinero’, la legendaria revista fanzinera de los años 80 creada por Eduardo Arias y Karl Troller; también el ‘Bogotono’, un reportaje fotográfico que aborda a Bogotá desde sus colores.

En cuanto a literatura se destaca la antología de poemas sobre Bogotá curada por el poeta Ramón Cote, así como los cuentos de Fanny Buitrago agrupados en ‘Líbranos de todo mal’, en el que se tratan temas de tensiones religiosas y políticas; o los relatos alrededor de cartas de R.H Moreno Durán en ‘Cartas en el asunto’, donde el autor explora lo trágico y lo cómico en Colombia, usando juegos mentales y asociaciones libres para representar la diversidad del país y de sus habitantes.

Otro título de la colección es ‘Diana cazadora’ del escritor bogotano del siglo XIX Clímaco Soto Borda, novela ambientada en Bogotá durante la Guerra de los Mil Días que satiriza la sociedad a través de la decadente vida cotidiana de sus habitantes. También encontramos al historietista argentino Daniel Rabanal con ‘Las aventuras de Gato: el oro de la Santamaría’ y ‘Las aventuras de Gato: la hermandad del Agua Clara’, que nos sumergen en desafíos misteriosos.

También la arquitectura tiene un lugar con Guillermo Angulo, autor de ‘Rogelio Salmona: arquitectura del tiempo y la memoria’ que explora en detalle las contribuciones de Salmona a la arquitectura contemporánea. Por su lado, Jimena Montaña Cuéllar narra la historia del río San Francisco y su relación con la Avenida Jiménez en ‘El río que corre’, subrayando la importancia de esta vía en el desarrollo de Bogotá.

El cronista Ricardo Rondón, que durante 26 años trabajó en el diario ‘El Espacio’, nos sumerge en el absurdo social y político de Bogotá con una selección de 20 de sus crónicas, hecha por el escritor Andrés Ospina, en el libro ‘Un espectáculo del absurdo’. En relación con esta Bogotá ‘underground’, pero a través de nueve cuentos, Roberto Rubiano Vargas se aproxima al crimen, las pandillas, los hippies, el comercio legal e ilegal y el narcotráfico en relación con el arte en ‘Un domingo antes del fin del mundo’.

También encontramos a la pionera del periodismo en Colombia, Emilia Pardo Umaña, quien explora temas de violencia y represión en los textos de ‘La letra con sangre entra’ mientras que el ensayista Germán Arciniégas narra la vida de Gonzalo Jiménez de Quesada y su búsqueda de El Dorado en ‘El Caballero de El Dorado’, brindando una visión profunda de la conquista de América.

Finalmente, en una visión narrativa más subjetiva y diversa de Bogotá, la escritora bumanguesa nacida en 1918 Elisa Mújica da voz a las casas de Bogotá en ‘Las casas que hablan’, permitiéndonos escuchar las historias de sus habitantes; mientras que Umberto Pérez y Luis Daniel Vega documentan la escena musical del rock en Bogotá entre 1957 y 1975 en ‘Una idea descabellada: instantáneas del rock en Bogotá’.

Esta colección se propuso seleccionar títulos que permitieran leer a Bogotá desde distintas esquinas y sobre las numerosas maneras de habitar esta ciudad. ¿Cómo son los bogotanos del siglo XXI?, ¿cómo conformamos una colección sin perder la perspectiva histórica?, ¿cómo ha cambiado Bogotá?, ¿cuántos derrumbamientos y reconstrucciones la han atravesado?

“La colección es muy interesante porque recoge temáticas como el rock, la música, la poesía y crónicas que se han publicado sobre Bogotá (…) queremos invitarlos a conocerla. Está disponible en la biblioteca digital de Bogotá y en todas nuestras bibliotecas”, finalizó la directora de BibloRed.  

La ONG Temblores publicó en la plataforma ‘Grita’ el resultado de un informe con cifras que llamaron la atención de expertas, expertos y la ciudadanía: en 2023 se presentaron 187 denuncias de casos de abuso policial contra 268 víctimas.

El año pasado hubo por lo menos tres variantes recurrentes del delito: discriminación (31 casos), administrativa y judicial (52 casos) y detención arbitraria, una de las denunciadas con mayor frecuencia por la ciudadanía (48 casos).

 

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Hubo reducción del delito, pero sigue siendo un número alto de denuncias

Temblores, una Organización No Gubernamental (ONG), nació como un espacio para la investigación y difusión de diversos hechos relacionados con los derechos humanos en Bogotá y en el país.

En la plataforma ‘Grita’, creada en febrero de 2020 y potenciada a raíz de los hechos de abuso policial en el marco de las manifestaciones entre 2020 y 2021 en toda Colombia, residen diversos documentos de la ONG que recopila información respecto a delitos relacionados con el uso y abuso de la fuerza, el incumplimiento de derechos en el momento de las detenciones y otras formas de violencia por parte de las autoridades.

La gran mayoría de las denuncias de abuso en 2023 residen en la violencia física, con 140 casos. La violencia homicida (es decir: la posibilidad de perder la vida durante un procedimiento de detención, probablemente por amenazas con armas de fuego u otros elementos letales) tuvo 22 casos, y la violencia sexual 6 casos.

“El 17,8 % de los casos fue por miembros de la UNDMO (antiguo ESMAD) y el restante por miembros del GOES y la Policía de Tránsito. Frente al 2022, identificamos una reducción del 45 % de los casos, pero para la violencia homicida sólo hubo una reducción del 15 %”, indicó Camilo Mendoza, investigador de Temblores.

 

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La investigación de la ONG también reveló que en Bogotá se presentaron el 51 % de los casos denunciados.

Según el informe, en el primer semestre de 2023 hubo 126 víctimas: 63 hombres, 42 mujeres, 2 mujeres trans y otras 19 sin información. Es decir que desde julio hasta diciembre hubo 61 casos: un número reducido en comparación, pero que, sumado a los más de 120 del primer semestre, arrojó el total de 187 denuncias por abuso policial.

“Esto, de alguna manera, obliga a que no solamente sea la Policía como institución la que haga el seguimiento y las acciones de mejora, porque esto tiene implicaciones con el Ministerio de Justicia, la Fiscalía e incluso con la Defensoría del Pueblo, que también ha hecho los llamados de atención correspondientes, pero no se ve que las otras instancias hagan los mecanismos regulatorios para garantizar la vida de las personas bajo custodia”, puntualizó Carlos Charry, director de Estudios Sociales de la Universidad del Rosario.

Las confrontaciones con las autoridades en protestas o manifestaciones son los escenarios más recurrentes de denuncia de violencia policial: el 25 % de los casos ocurrieron en el marco de una movilización. Además de ello, el cambio del ESMAD al UNDMO sí ha tenido la contundencia nominal esperada: el investigador Charry indica que la percepción de los jóvenes respecto a este grupo de reacción inmediata, pese a que mantiene la misma indumentaria y los mismos elementos y procedimientos, mejoró un 35 %. Esto incluye al cuerpo policial en general.

“Hacemos un llamado a la Policía Nacional y al Gobierno Nacional para que en el contexto de la Directiva permanente 09 de implementación de los lineamientos de la Transformación Policial + Humana se incluyan estrategias para reducir y sancionar disciplinariamente los casos de procedimientos irregulares y hostigamientos policiales”, señaló el informe de Temblores.

¿Cómo denunciar un caso de violencia policial?

Vale destacar que Temblores es una ONG que recopila información y hace visibles diversas irregularidades relacionadas con los derechos humanos, pero no es un mecanismo de justicia, por lo tanto, si bien pueden brindar las bases, orientar y visibilizar, lo fundamental es denunciar los hechos de abuso policial en las instancias correspondientes.

Las víctimas de estos hechos pueden acudir a las entidades encargadas de vigilancia y control del trabajo de la Policía Nacional, entre esas aparece, justamente, la misma Policía: en unidades policiales, comandos de metropolitanas, departamentos de policía y escuelas de formación policial hay Oficinas de Atención al Ciudadano (OAC) para presentar quejas, reclamos, peticiones o sugerencias respecto al ejercicio de las autoridades.

 

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También puede acudir a la oficina de asuntos disciplinarios de la Procuraduría General de la Nación o la Unidad contra Violaciones de DD. HH. de la Fiscalía General de La Nación.

En el caso de Bogotá hay dos entidades que están encargadas de velar por los derechos de ciudadanas y ciudadanos: la Secretaría de Gobierno y la Secretaría de la Mujer. En diversas instancias de estas entidades se puede hacer una denuncia por violencia policial.

 

El pasado miércoles 3 de abril, el proyecto de la Reforma a la Salud planteado por el Gobierno Nacional se hundió en la Comisión Séptima del Senado. El documento, que tuvo un concepto aprobatorio inicial después de varias controversias, no llegó a tener las suficientes bases para ser aprobado e instaurado.

Para expertas y expertos, este fue un tropiezo considerable teniendo en cuenta que las banderas del Gobierno en cuanto a reformas se centran en tres movimientos principales: la salud, las pensiones y la educación. Además, el proyecto de la Reforma a la Salud empezó sus diversos trámites desde que Gustavo Petro se convirtió en presidente del país: casi dos años después, el discutido texto se cayó.

Ahora bien, tras no hallarle más signos vitales a la Reforma, hubo diversos movimientos políticos e institucionales que todavía permanecen en discusión: la intervención de la Superintendencia de Salud a varias EPS y el anuncio de ajustes en el sistema por medio de decretos.

 

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Modificaciones en la salud: ¿una reforma más pequeña?

El panorama de la salud en el país parece más grave, al menos desde la óptica de la ciudadanía y las y los afiliados a distintas Entidades Prestadoras de Salud. Luego del hundimiento de la Reforma, hubo una serie de intervenciones de Supersalud en al menos siete EPS: Savia Salud, Asmet Salud, Emssanar, Famisanar, Sanitas, Servicio Occidental de Salud y Nueva EPS.

Si bien la intervención está más relacionada con las auditorías de procesos y la revisión del funcionamiento de las EPS, no deja de ser un llamado de atención para las empresas del sector salud y también para las expertas y los expertos.

“Al hundirse la Reforma a la Salud, el Gobierno opta por sacar una serie de decretos. Cuando hace eso, uno se pregunta si realmente era necesaria la reforma porque ya había unas leyes, como la Ley 1438 de 2011o la Ley Estatutaria en Salud de 2015, que establecían el modelo de atención primaria”, puntualizó el profesor de la Universidad de Los Andes Luis Jorge Hernández.

Justamente una de las grandes discusiones recientes tiene relación con la atención primaria en salud.

Definida por el Ministerio de Salud, la atención primaria es “la estrategia de coordinación intersectorial que permite la atención integral e integrada, desde la salud pública, la promoción de la salud, la prevención de la enfermedad, el diagnóstico, el tratamiento, la rehabilitación del paciente en todos los niveles de complejidad, a fin de garantizar un mayor nivel de bienestar en los usuarios, sin perjuicio de las competencias legales de cada uno de los actores del Sistema General de Seguridad Social en Salud”.

En esencia, es el gran bloque teórico de lo que representa la salud para las ciudadanas y los ciudadanos. Dado que abarca prácticamente todo lo relacionado con este campo, las modificaciones vía decreto pretendidas por el Gobierno tendrían incidencia probable en cualquier estamento del panorama de la salud del país.

“Es vital que trabajemos en la carrilera de la calidad para poder llevar a buen puerto el modelo de atención en Bogotá”, planteó Gerson Bermont, secretario distrital de Salud.

 

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El giro directo y el tarifario único: ¿cómo se optimizaría la llegada de los recursos a los hospitales?

En su momento, uno de los planteamientos más discutidos de la Reforma a la Salud fue la posible transformación de la Administradora de los Recursos del Sistema General en Seguridad Social en Salud (ADRES, por sus siglas) para que hubiese una relación mucho más directa entre el Ministerio de Salud y los hospitales. Actualmente, los recursos para los centros de salud pasan primero por el ADRES antes de llegar a los sitios donde se utilizarán.

Fue por ello que, una vez hundida la Reforma y puestos en marcha los cambios en el sector salud, se habló del giro directo.

“El giro directo pretende generar un mayor flujo de recursos a las instituciones prestadoras de servicio de salud. ¿Haciendo qué? Evitando que el dinero pase por la vía de las EPS. Sin embargo, las EPS tienen la responsabilidad de revisar todas las cuentas que se van a pagar desde el ADRES”, explicó Enrique Peñaloza Quintero, docente experto en salud de la Universidad Javeriana.  

Otro punto a señalar fue el tarifario único, medida que pretende homogeneizar los costos en salud en el país por medio de la consolidación de una especie de manual.

Cuando se planteó esta posibilidad, Alberto Martínez, viceministro de Protección Social, indicó: “El acto administrativo se publica esta semana, ya se ha venido validando con prestadores públicos y privados, agremiaciones y talento humano en salud. Este tiene unos componentes de actualización en procedimientos quirúrgicos, intervenciones, traslados e internación”.

 

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“El tarifario lo que va a buscar es que existan unos precios de referencia en el sistema. Pero es muy importante comprender que el tarifario debería funcionar como un techo o como una base”, afirmó el profesor Peñaloza Quintero.

Los expertos coinciden en que, a diferencia de los planteamientos de un proyecto de reforma, hay varias leyes o recursos con los cuales se pueden llevar a cabo estas iniciativas desde el Gobierno. Se estima que al menos ocho decretos podrían expedirse para iniciar el trámite de las transformaciones del sector salud.

Ante los bajos niveles de los embalses que nutren a la ciudad, la Alcaldía de Bogotá aplicó el racionamiento de agua: durante 24 horas, desde las 8 a.m., algunas zonas de la ciudad se quedaron sin el servicio. Esta restricción se pensó de manera sectorizada, por localidades y por barrios.

Este jueves comenzó el Turno 1, comprendido por barrios en 10 localidades: Antonio Nariño (23 barrios), Barrios Unidos (53), Chapinero (18), Los Mártires (22), Puente Aranda (69), Rafael Uribe Uribe (28), Santa Fe (1), Teusaquillo (52), Tunjuelito (4) y Usaquén (16).

 

¿Cómo se alistaron los comercios y las ciudadanas y ciudadanos de estas zonas? Aunque el aviso se dio el lunes y la programación se concretó al comienzo de la semana, todavía hay cierto desconcierto e inconformismo respecto a las horas del racionamiento.

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Un vistazo al barrio Galán en el primer día sin agua

A las 8 de la mañana de este jueves 11 de abril comenzó la primera etapa de racionamiento de agua en Bogotá. Habrá nueve turnos en toda la ciudad e incluso en municipios aledaños y luego del 19 de abril (día de la última jornada de restricción) se tomarán decisiones respecto al funcionamiento de la medida.

Es importante resaltar que los cortes se planean ante las condiciones climáticas adversas que afectan el agua y, al menos en principio, el uso de este recurso incluso para actividades energéticas.

AHORA llegó hasta el barrio Galán, en Puente Aranda, para conocer las medidas tomadas por los comercios y otros establecimientos teniendo en cuenta que el agua potable no volverá sino hasta el viernes en la mañana.

Con un primer rastreo, llevado a cabo incluso en días anteriores, se concluyó que las personas se habían preparado recolectando agua para las actividades cotidianas. Asimismo, las tiendas y negocios se suplieron de la cantidad suficiente del recurso para no cesar sus operaciones mercantiles.

“A nosotros nos agarró así (de sorpresa) porque no depositamos agua. Tuvimos que ir ayer y comprar canecas para llenarlas de agua y tomar estas medidas que son por un bien para todos (…) Pero ahí tenemos agua para trabajar el día de hoy y parte del día de mañana (…) El agua es para el baño y ya tenemos unos botellones para hacer el pan, también tenemos para lavar la loza”, indicó José Camacho, comerciante del barrio Galán.

De todas formas, el aviso inicial del lunes funcionó para que los negocios y las viviendas alistaran sus mecanismos para el día sin agua. La recolección en baldes, ollas y otros recipientes ha sido el factor clave para el transcurso de la jornada.

“Dejamos unas canecas con agua y la capuchinera que trabaja con agua directa. También hicimos una adaptación para que no haya ningún problema y se pueda atender al cliente de forma común y corriente”, señaló la comerciante Yaneth Sánchez.

Pasando a las viviendas, las ciudadanas y los ciudadanos recolectaron agua y en general están de acuerdo con la medida restrictiva en tanto todo sea por el buen manejo del recurso y el cuidado de los embalses. Pero las opiniones siguen divididas: para algunos, es necesario el racionamiento; para otros, hay una cuestión cultural de fondo sobre el uso del agua que va mucho más allá de ‘cerrar el grifo’.

“Me parece que no es tan buena medida porque la gente se aprovisiona más de agua en vez de lo necesario. Se me hace que el consumo va a ser más”, opinó un ciudadano.

Duchas de 3 minutos y usar el agua en acciones necesarias: el llamado sigue siendo al ahorro

Más allá de restricciones de veinticuatro horas, la Alcaldía y diversas entidades instan al cuidado del agua en las actividades diarias y sobre todo en las zonas que no iniciaron la restricción: no lavar el carro con flujo directo de la manguera, cerrar la llave al cepillarnos los dientes y también de forma intermitente al lavar la loza, tomar duchas de entre 3 y 5 minutos y, en esencia, pensar dos veces antes de usar agua para algo que probablemente no sea tan necesario.

“En realidad uno no amanece sucio. Uno bien se podría bañar día de por medio sin ningún problema (…) Creo que culturalmente estamos mal enseñados porque siempre hemos contado con la abundancia del recurso del agua, entonces no estamos enseñados a ahorrar y usar bien el agua”, señaló la ciudadana Alida Rincón.

Vale destacar que la medida de racionamiento tiene un objetivo trazado desde la Alcaldía: reducir el consumo de 18 metros cúbicos por segundo a 15 metros cúbicos.

Recuerde que, para este viernes 12 de abril, el Turno 2 contempla barrios en dos localidades y un punto de suministro: Engativá (290 barrios) y Fontibón (21) y el punto de suministro de ESP Aguas La Sabana (Zona Industrial Cota).

 

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Recomendaciones para ahorrar agua:

-Bañarse en menos de cinco minutos.
-Calcular el agua que va a necesitar.
-No sobreabastecerse.
-Revisar el estado de las tuberías en viviendas.
-Usar un vaso como recipiente de agua cuando se lave los dientes.

 

*Contenido financiado por el Fondo Único de TIC

En un esfuerzo conjunto entre la Policía de Bogotá y la Fiscalía, el alcalde de Bogotá Carlos Fernando Galán anunció la realización de operativos desde la madrugada del miércoles en las localidades de Suba, Usme y Ciudad Bolívar, con el objetivo de desarticular bandas delincuenciales dedicadas al homicidio, extorsión, hurto de motos y tráfico de estupefacientes.

Según el reporte del mandatario, se reportaron 30 capturas en estas zonas. Entre los detenidos se encuentran presuntos implicados en delitos como microtráfico, porte de armas de fuego, extorsión, homicidio y hurto a personas.

“En este esfuerzo se hicieron 35 registros y allanamientos en la madrugada de hoy que empezaron cerca de la 1 de la mañana y dieron como resultado la captura de 30 personas y varios elementos hurtados, también armas. En el marco de las prioridades que hemos tenido desde el primer día en está alcaldía en el marco de ‘Bogotá camina segura’ como delitos prioritarios: el hurto, la extorsión, el homicidio y el multicrimen”, expresó el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán.

Uno de los grupos desarticulados, conocido como ‘Los Inquietos’, fue objeto de nueve capturas en Suba, Engativá y Usme por hurto calificado y agravado, concierto para delinquir y extorsión. Su modus operandi consistía en el hurto de motocicletas mediante atracos en vía pública, para posteriormente extorsionar a las víctimas pidiendo dinero para devolver el vehículo robado.

Otro grupo, desmantelado durante la operación ‘Alameda’, se dedicaba al tráfico local de estupefacientes en Usme y Rafael Uribe Uribe. En este caso, se lograron 13 capturas y dos imputaciones, además de la incautación de 15 dosis de sustancia estupefaciente tipo bazuco y siete celulares, afectando la renta criminal del tráfico local de estupefacientes hasta en 100 millones de pesos.

Finalmente, se informó sobre la captura de ‘Los Galeras’, una organización criminal responsable de homicidios selectivos en Ciudad Bolívar por el control territorial de estupefacientes. En el operativo, se decomisó un fusil M4, 30 cartuchos de munición, dos kilogramos de marihuana, una gramera y diez celulares, lo que representó un golpe de 300 millones de pesos a las finanzas criminales de los expendedores de estupefacientes en la zona.

El alcalde Galán destacó la importancia de estos operativos para garantizar la seguridad en Bogotá y anunció que se seguirá trabajando para desarticular estas organizaciones criminales y brindar tranquilidad a los ciudadanos.

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